Embarcarse en la reforma de una vivienda puede ser una experiencia agotadora, pero generalmente responde a la necesidad de actualizarla para mejorar nuestra calidad de vida. Si hay algo que proporciona esta calidad de vida tan deseada es el contar con el mejor aislante térmico y acústico para paredes. Siempre es un buen momento para recordar la diferencia entre rehabilitación y reforma. Del mismo modo que es importante contar con la ayuda de expertos para saber el tipo de obra que se puede hacer, así como la gestión de la licencia y los permisos necesarios. Esto evitará más de un quebradero de cabeza.

Es cierto que tener una casa con un buen diseño y bien distribuida ayuda a que esta se convierta en el hogar que siempre hemos deseado, pero esto debe ir acompañado de un verdadero confort. Por eso contar con una temperatura regulada y estar protegidos de los ruidos externos resulta esencial.

Aislar adecuadamente nuestra casa es una buena inversión que nos permitirá ganar en comodidad y ahorrar a largo plazo. Hagamos un recorrido por las distintas opciones que nos ofrece el mercado en materiales y características.

Mejores aislantes acústicos

Si hay algo que puede resultar realmente molesto mientras disfrutas de la tranquilidad de tu hogar es el ruido. Tanto si vives en una zona urbana como cerca de una carretera o una zona de paso, el ruido puede ser inevitable. Lo que sí puede evitarse es que tú tengas que soportarlo, siempre que cuentes con el aislamiento adecuado. 

El aislamiento acústico permite insonorizar paredes, techos y suelos para proporcionarte una mejor calidad de vida. Para escoger el mejor aislante que utilizar en la reforma para aislar la vivienda de estos ruidos es necesario diferenciar los tipos de ruidos a los que nos enfrentamos, ya que cada uno de ellos requiere materiales diferentes para la instalación:

  • Ruido aéreo: Se origina y propaga a través del aire. Es el más habitual y el más fácil de solucionar. Por ejemplo, el ruido de la televisión, los sonidos de la calle…
  • Ruido de impacto: Se origina a partir de golpes y se transmite mediante la estructura, por lo general del suelo al techo. Por ejemplo, taconeo, arrastre de muebles, caída de objetos…

Esto permitirá elegir el aislante adecuado que más se adapte al tipo de ruidos que queremos paliar. Además, también es necesario tener en cuenta elementos externos como puertas y ventanas, que juegan un papel fundamental en el aislamiento. 

Por norma general para el aislamiento acústico se utilizan materiales pesados, de alta densidad y rígidos como:

  • Hormigón, terrazo o acero. Materiales rígidos utilizados generalmente en construcción.
  • Láminas pesadas y flexibles de caucho, asfalto o betún.
  • Cámaras de aire entre paredes que permiten además agregar materiales absorbentes como lana de vidrio o roca para hacer el aislamiento más efectivo.

Poliuretano

Utilizado generalmente para techos y tabiques. Se utiliza en forma de espuma o en planchas para el aislamiento acústico aéreo.

Geotextil

Reciclable y de gran durabilidad. Tiene una gran capacidad de absorción acústica y puede colocarse de forma adhesiva, clavado y atornillado en muros o techos. También puede utilizarse como aislamiento térmico.

Lana de roca o fibra de vidrio

Estos materiales permiten absorber los sonidos y el ruido aéreo. Además, son resistentes al contacto con el fuego y son incombustibles.

Planchas asfálticas

Son ideales para insonorizar a baja frecuencia. Es un material flexible que permite amortiguar y absorber estruendos.

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Mejores aislantes térmicos

Los aislantes térmicos permiten reducir la transmisión de calor en una vivienda y aislarla térmicamente de las bajas temperaturas exteriores. Para aplicarlos es necesario tener siempre en cuenta las fachadas, el techo, los suelos, las puertas y las ventanas, ya que son los elementos que más permiten mantener la temperatura idónea. En su día ya analizamos los distintos tipos de chimeneas que existen en el mercado, pero su instalación en muchos casos no es suficiente para conseguir la temperatura más confortable en las estancias más concurridas.

Contar con un buen aislamiento térmico no solo te permitirá mantenerte a salvo del frío durante el invierno, sino que permitirá que la casa se mantenga mucho más fresca durante el verano. De esta manera las estancias del hogar se hacen más eficientes y permiten un uso más adecuado de los recursos energéticos.

Algunos de los efectos más positivos que puede aportar el mejor aislante térmico para paredes pueden ser:

  • Reducción del consumo: Permite contribuir al ahorro energético en los sistemas de climatización y, por tanto, reducir también el consumo.
  • Comodidad y bienestar: La temperatura dentro de la casa se mantiene estable y equilibrada independientemente de la época del año y la temperatura exterior.
  • Prevención de humedades: Evita la aparición de puntos fríos en los que pueda concentrarse la humedad y aparecer moho.
  • Respeto al medio ambiente: Al reducir el consumo se reduce también el gasto energético y, por tanto, las emisiones de dióxido de carbono.

Para encontrar el mejor aislante térmico para paredes hay que tener en cuenta elementos como la situación geográfica de la vivienda, el tipo de vivienda, su viabilidad técnica o el coste. A ello se unen las características de los materiales que pueden elegirse, ya que pueden ser determinantes e inclinar la balanza a la hora de tomar la decisión.

  • Alta resistencia térmica: La capacidad del material para oponerse al flujo de calor. Cuanto más alta más eficaz será el aislamiento.
  • Baja conductividad térmica: Indica la capacidad del material para transmitir el calor y la facilidad con que lo conduce. Cuanto más baja sea más fácil será evitar la pérdida de calor.
  • Resistencia al paso de vapor de agua: Es clave para evitar condensaciones y tiene que ver con el espesor y la permeabilidad del material.
  • Buen comportamiento ante el fuego: Cuanta mayor resistencia al mismo mayor seguridad para la vivienda.

Aislamiento térmico sintético

Suelen ser materiales económicos y con buenas prestaciones producidos con derivados del petróleo. Entre ellos encontramos:

  • Poliestireno expandido: Es versátil y fácil de instalar. Tiene forma de paneles y permite absorber la humedad. Ideal para fachadas impermeabilizadas, paredes y techos.
  • Poliestireno extruido: Similar al anterior pero más denso y con mayor resistencia a la humedad. Se utiliza en planchas de menor grosor. Utilizado en fachadas, cubiertas, techos y muros enterrados.
  • Poliuretano: Se encuentra por lo general en forma de espuma y se endurece tras su aplicación. Se puede cortar, lijar, enyesar y pintar. Generalmente se utiliza para rellenar cámaras, huecos y aislar zonas pequeñas.

Aislamiento térmico mineral

Son materiales de origen natural, por lo general se presentan en forma de fibras que contienen aire. Funcionan tanto como aislantes térmicos como aislantes acústicos:

  • Lana mineral (o de vidrio): Se forma a partir de arena de sílice, carbonato de calcio y magnesio. Resiste la humedad y se usa para cubiertas, fachadas, buhardillas, suelos y paredes interiores.
  • Lana de roca: Se forma a partir de roca volcánica fundida. No es inflamable y se puede encontrar en forma de rollos. Las aplicaciones que presenta son las mismas que las de la lana mineral.

Aislamiento térmico de origen vegetal/ecológico

Se consideran materiales sostenibles ya que no emiten gases o desechos tóxicos. Además, su producción requiere menos energía de lo normal:

  • Corcho: Ligero, resistente a la humedad y de larga durabilidad. Se encuentra en planchas, rollos y losetas, en función de la zona en que se instale.
  • Celulosa: Fabricada con papel reciclado triturado al que se añaden aditivos (boro) para proporcionarle propiedades ignífugas. Adecuado para zonas frías por su alta capacidad de conservar el calor.
  • Fibras de madera: Se obtienen de restos de madera triturados y contienen sales de boro que les dan propiedades ignífugas. Retienen el calor a lo largo del día y lo liberan por la noche, permitiendo tener una temperatura equilibrada todo el día.

Aislamiento térmico reflexivo

Este tipo de aislamiento está diseñado para aislar esencialmente paredes internas o buhardillas. Son finos y se componen de diferentes capas, habitualmente de burbujas de polietileno o espuma. Cuantas más capas, mayor es el aislamiento que proporciona. El aislamiento térmico reflexivo es una solución a tener en cuenta a la hora de plantear un rediseño de una estancia o como elemento para la decoración para estudios pequeños.

En Gilmar Soluciones Constructivas te podemos asesorar sobre el mejor aislante para la reforma de tu vivienda. Déjanos ayudarte en tu proyecto y conseguirás un resultado a la altura de tu inmueble. Contamos con el equipo más completo de interioristas, jefes de obra y técnicos de estudio para ayudarte con la reforma que tu casa necesita.2