Sin lugar a dudas, una de las escenas más dramáticas que ha traído la crisis económica ha sido la de familias siendo desahuciadas de sus domicilios ante la imposibilidad de poder afrontar el pago de la hipoteca. Es por ello que desde Gilmar, si bien el último dato que ha publicado el INE nos recuerda que este problema aún persiste, lo recibimos con optimismo. Pues viene a reflejar que las ejecuciones hipotecarias sobre vivienda habitual de personas físicas ha caído un 59,8% anual.

Esta supone la mayor caída en un año desde que este organismo oficial empezó a publicar datos sobre ejecuciones hipotecarias en 2014.

Datos desglosados

Las ejecuciones hipotecarias son procedimientos ejecutivos a través de los cuales se ordena la venta de un bien inmueble que estaba gravado con una hipoteca por incumplimiento del deudor de las obligaciones garantizadas con la hipoteca. Durante el tercer trimestre el número de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias iniciadas en los registros de propiedad sobre el total de fincas fue de 9.025.

Esto supone un 33,7% menos que el trimestre anterior y un 38,4% menos que en el mismo trimestre de 2016. De estas 9.025 ejecuciones hipotecarias, 1.584 corresponden a ejecuciones sobre viviendas habituales de personas físicas. Son este tipo de ejecuciones hipotecarias aquellas que son más susceptibles de terminar en desahucio, si bien el INE recuerda que no todas las ejecuciones de hipoteca que se inician terminan con el lanzamiento de sus propietarios y que un procedimiento judicial puede dar lugar a varias certificaciones por ejecución de hipoteca.

Estas 1.584 ejecuciones hipotecarias sobre vivienda habitual de personas físicas suponen un 43,2% menos que las 2.788 registradas el trimestre anterior y un 59,81% menos que las 3.941 que se produjeron en el mismo periodo del año anterior. Se produce por tanto el mayor descenso tanto trimestral como anual en toda la serie histórica desde que el INE comenzó a realizar estas estadísticas en 2014 (ver imagen).

Fuente: Instituto Nacional de Estadística

Los procesos que se ejecutan hoy siguen siendo sobre hipotecas firmadas antes de la explosión de la burbuja inmobiliaria. De hecho, el 19,8% de las ejecuciones hipotecarias iniciadas sobre viviendas en el tercer trimestre correspondieron a hipotecas constituidas en el año 2007, el 16,5% a las suscritas en 2006 y el 12,1% a las de 2008. El periodo 2005-2008 concentra el 59,5% de las ejecuciones hipotecarias iniciadas este trimestre.

Según el INE, los mayores valores se alcanzaron en 2014, 2013, 2008 y 2007. El 0,08% en 2013 y el 0,07% en 2007, 2008 y 2014 de las hipotecas constituidas sobre viviendas esos años ha iniciado una ejecución hipotecaria en el tercer trimestre de 2017.

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Total viviendas

Si a las ejecuciones hipotecarias a personas físicas sobre su vivienda habitual les sumamos las ejecuciones sobre vivienda no habitual y las ejecuciones sobre viviendas pertenecientes a personas jurídicas, en total suman 4.676 en el tercer trimestre. De este modo, las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas concentran el 51,8% del total de ejecuciones hipotecarias. El 17,5% del total de ejecuciones hipotecarias son viviendas habituales de personas físicas, el 28,9% corresponde a viviendas de personas jurídicas y el 5,4% a otras viviendas de personas físicas.

Si ponemos el foco en las viviendas según su estado, se observa que el 22% de las ejecuciones hipotecarias en el tercer trimestre son sobre viviendas nuevas y el 78% sobre usadas. Por tanto, el número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas nuevas aumenta un 24,4% en tasa anual, mientras que el de usadas baja un 48,7%.

Finalmente, observando los datos por Comunidades Autónomas, Andalucía (1.425), Comunitat Valenciana (915) y Cataluña (677) presentaron el mayor número de ejecuciones. En el otro extremo, Comunidad Foral de Navarra (11), País Vasco (19) y La Rioja (31) los menores.

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