Ni la primera ola de calor del verano ni la temprana hora del domingo lograron frenar el impulso solidario que recorrió el Paseo de la Castellana el pasado 29 de junio. En su segunda edición, la Carrera Madrid con el ELA volvió a demostrar que la generosidad y el compromiso social pueden más que cualquier obstáculo. Y allí estuvo GILMAR, presente con fuerza, corazón y un equipo entregado a una causa que merece toda la visibilidad posible.

Desde primera hora, la oficina de GILMAR Viso-Chamartín se convirtió en punto de encuentro. Un desayuno energizante, sonrisas compartidas y camisetas naranjas listas para teñir las calles de esperanza. Así arrancaba una jornada que, más allá del deporte, fue una celebración de la vida y de la lucha de quienes conviven con la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).

Con más de 3.000 corredores en la línea de salida, entre la Plaza de Cuzco y la calle Juan Hurtado de Mendoza, el ambiente era una mezcla de emoción, respeto y entusiasmo. Muchos de los presentes, como el equipo de GILMAR, participaron en la prueba de 5 km, aunque algunos valientes optaron por los exigentes 10 km. No faltó tampoco representación en la Carrera de la Superación, de 250 metros, donde personas con discapacidad participaron acompañadas de sus seres queridos.

El verdadero motor del día fueron, sin duda, los enfermos de ELA. Aplaudidos, animados y, en muchos casos, empujados por familiares y amigos, cruzaron el recorrido con una entereza que conmovió a todos los presentes. Fueron ellos quienes dieron verdadero sentido al esfuerzo de cada zancada.

Los beneficios recaudados se destinarán íntegramente a la Asociación Española de ELA (adELA), entidad sin ánimo de lucro que desde 1990 trabaja por mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias. Su labor, declarada de utilidad pública, se extiende por todo el país, ofreciendo atención asistencial, recursos y acompañamiento a quienes más lo necesitan.

Para GILMAR, haber formado parte de esta jornada ha sido un orgullo. La “marea naranja” que avanzó por el centro de Madrid fue el reflejo del espíritu de equipo, la solidaridad y el compromiso social que forman parte del ADN de la compañía. Fue un día de deporte, sí, pero también de emoción, de encuentro y de propósito común.

Galería de fotos:

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Gracias Ismael García, Philip Pérez-Cirera , Álvaro Martínez, María Santos, Belén Ramiro, Laura Sánchez, Teresa Ortiz, Carlos Aznal, Laura Pérez Maestro, Vanesa Ruiz, Judith Ramos, Laura Moya, Gonzalo Sánchez Fernández-Escribano, Antonio Elías, Begoña Ramírez, Ignacio Martínez Guisado, Javier Samaniego, José Alberto Romero, Verónica Nieto y José Ignacio Blázquez, a vosotros y a vuestros acompañantes, por lucir el color de GILMAR y representar nuestros valores cuando importa. Porque correr, cuando es por los demás, se convierte en algo mucho más grande que una meta. Se convierte en una causa. Y GILMAR siempre está ahí.