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¿Estás preparado para vivir una fiesta de Halloween terrorífica? ¿Necesitas ideas para vivir esta fiesta de una manera diferente? Si vives en Madrid, te invitamos a hacer un recorrido a lo largo de la provincia, donde te llevaremos a algunos de los sitios más misteriosos de la ciudad. Esos sitios que escapan de los circuitos más populares. Los lugares que cuanto más desconocidos y solitarios, son más atractivos para las mentes inquietas: los lugares más terroríficos de Madrid.
Madrid es una ciudad maravillosa para vivir, donde las oportunidades gastronómicas, deportivas, culturales y de ocio parecen no tener fin. Pero también es una gran ciudad para morir. En una ciudad como Madrid, el necroturismo o turismo de cementerios también ha experimentado un cierto crecimiento en los últimos tiempos.
Turistas y residentes recorren durante todo el año los camposantos a la caza y captura de las historias más curiosas y enigmáticas. El Cementerio de la Almudena, el de San Isidro o el Panteón de Hombres Ilustres son algunos de los preferidos por los visitantes y practicantes de esta modalidad cultural. Tradicionalmente la festividad de Todos los Santos suele llenar los cementerios de personas que se acercan a llevar flores a familiares y amigos, por lo que están especialmente concurridos en estas fechas y no tienen ese olor a misterio que queremos enseñarte.
Vamos a descubrir algunos de los rincones de Madrid que esconden las historias o experiencias más aterradoras. Las características habituales de estos edificios, es que se trata de construcciones con un encanto especial y que tuvieron cierto esplendor en el pasado. Las paredes han sido testigo de todo tipo de episodios, dramáticos o no, pero que por distintas circunstancias han desembocado en abandono y decadencia.
El escenario perfecto para que se desarrollen tus peores pesadillas. ¿Te dará tiempo a visitar los lugares más terroríficos de Madrid este Halloween?
Índice
El Pabellón de los Hexágonos, una joya abandonada en la Casa de Campo
Uno de los misterios de este edificio, el Pabellón de los Hexágonos en la Casa de Campo, basado en módulos hexagonales, es el hecho de que haya pasado tantos años desapercibido para los madrileños. En la Exposición Universal de Bruselas de 1958, el pabellón, obra de los arquitectos José Antonio Corrales y Ramón Vázquez Molezún, ganó el primer premio por delante de construcciones tan reconocibles como el Atomium de la propia capital belga. Sin embargo, muchos somos los madrileños que no sabíamos de su existencia.
Medio siglo después el edificio ha estado sumido en un abandono que ha deteriorado los materiales y ha propiciado la caída en el olvido del llamado “bosque de los paraguas”, hasta que hace unos meses, el Ayuntamiento decidió darle una segunda oportunidad. Los trabajos de rehabilitación pretenden convertir esta joya arquitectónica en un nuevo museo de arte moderno para la ciudad de Madrid. Para saber más, aquí hablamos de 5 edificios de Madrid con gran valor arquitectónico.
¿Acaso esconde un secreto que se ha querido ocultar para los ciudadanos?
Sanatorio de La Marina en la Sierra de Guadarrama
En el municipio de Los Molinos al terminar la Guerra Civil Española se construyó el Sanatorio de Marina, alejado del bullicio y la contaminación de la capital. Levantado junto a la Sierra de Guadarrama, el Sanatorio de La Marina, al igual que muchos otros de la zona, sirvió para atender enfermedades pulmonares, en este caso de militares. No dejaría de ser uno más de esos hospitales abandonados sino fuera por la gran cantidad de experiencias misteriosas recogidas por quienes han visitado este lugar que, desde 2002 ha pasado a convertirse en almacén del ayuntamiento.
Puertas que se cierran misteriosamente, golpes, ruidos de personas y animales… son solo algunos de los episodios que parecen repetirse por quienes recorren los pasillos y estancias de este antiguo sanatorio. Una construcción que recuerda más un lujoso hotel del siglo pasado que a un lugar donde acudían los militares aquejados de problemas respiratorios.
La presencia de quirófanos, de cajas fuertes para las armas de los pacientes, vagabundos, okupas y una pequeña capilla contribuyen a incrementar el halo misterioso que envuelve todo el entorno. Y que lo convierten en el segundo de los lugares más terroríficos de Madrid de este listado.
Palacio del Canto del Pico
El Palacio del Canto del Pico es una casa muy reconocible para los habituales de la Carretera de La Coruña. A la altura del Casino de Torrelodones se erige este palacete en uno de los puntos más altos de la zona, una roca de granito, que tiene forma de pico de ave, y que es lo que terminó bautizando a la construcción. Es un palacio singular que incorpora diferentes y valiosos elementos artísticos y arquitectónicos.
El palacio fue propiedad del Conde de Las Almenas, hasta que, a su muerte en los años 40, lo dejó en herencia a la familia Franco, que lo disfrutó como finca de recreo durante más de tres décadas. Durante la Guerra Civil Española fue la sede del Estado Mayor del Ejército Republicano y el lugar desde el que se dirigían algunas de las batallas. Con la muerte de Franco el palacio sufrió diferentes saqueos, expolios, incendios y destrozos, dando lugar a esa imagen de abandono de la que hoy en día se le quiere sacar.
A la leyenda y el misterio del palacio contribuye su caprichoso aspecto fantasmagórico, que recuerda a una casa encantada del cine de terror en blanco y negro. Además, el hecho de que el estadista Antonio Maura falleciera repentinamente en una vista mientras descendía por unas escaleras, también ha incrementado los recelos hacia este edificio. Una placa en el interior del palacio recuerda esta muerte: “Bajando por esta escalera, ascendió al cielo don Antonio Maura”.
Sea por la razón que sea, ya no volverás a mirar del mismo modo el palacio, de los lugares más terroríficos de Madrid sin lugar a dudas.
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Piscina Stella, en Arturo Soria
Situada en el corazón norte de Madrid, con una ubicación envidiable y unas vistas únicas de la zona, la piscina Stella es otra de las construcciones que no deja indiferente a nadie y por eso la incluimos entre los lugares más terroríficos de Madrid. De estilo modernista el edificio principal recuerda a un club náutico, el sitio perfecto para descansar tras una intensa jornada de navegación ¿por la M-30?
El abandono y el misterio que rodea a los propietarios, hacen que este edificio, otrora punto de encuentro y de ocio de la clase elitista madrileña, esté en la guía de sitios abandonados más atractivos de la capital. Por la piscina de este icónico club de la modernidad madrileña, han pasado famosas personalidades del mundo del deporte, del espectáculo y de la cultura.
El deterioro visible de la estructura y de los muros que rodean la construcción, convierten la Piscina Stella en el escenario perfecto para albergar una película de terror. No cuesta mucho imaginar un buen guion que saque partido a sus instalaciones y a su enclave.
Dos paradas más: de la Casa de las Siete Chimeneas al Palacio Linares
Terminemos este tétrico paseo con dos de los lugares más terroríficos de Madrid (si te quedas con ganas de más, en este artículos hablamos de rutas por el Madrid más misterioso). Para cerrar el círculo y vivir una jornada de aventura y misterio nos dirigiremos al eje Gran Vía-Alcalá donde encontramos dos de los puntos de la ciudad que encierran más historias de misterio:
La Casa de las Siete Chimeneas situada en la Plaza del Rey, junto a la calle Barquillo, esconde una historia de amor, muerte y desaparición de cuerpos más que atractiva para quienes disfrutan a golpe de susto. Una pintoresca edificación que tiene todo -incluso el nombre- para dejar escapar la imaginación de lo que allí sucedió no hace tantos años.
Para concluir la jornada, en la Plaza de Cibeles, en la confluencia de las calles Alcalá y Recoletos, nos encontramos con el Palacio de Linares o Casa de América. La banda sonora de este bello y privilegiado edificio revolvió las mentes de los madrileños a ritmo de unas psicofonías hace un par de décadas, en las que se escuchaba nítidamente a una niña susurrar: “¡Mamá, mamá…. yo no tengo mamá!” Un episodio que se alimentó por la leyenda de la oscura vida pasada de los Marqueses de Linares, a través de los apuntes de escritores e investigadores de la época, que han ayudado a que este sea otro de los lugares más terroríficos de Madrid.
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