Una buena distribución de una casa es fundamental para que cualquier espacio resulte más amplio, cómodo y práctico. Por el contrario, una mala distribución puede desaprovechar la superficie útil, entorpecer la circulación o restar espacio de almacenaje.

Aunque no existe una distribución ideal que se adapte a todos los proyectos, desde Gilmar te damos las claves que te ayudarán a sacar mucho más partido a tu casa.

Antes de profundizar en ellas, te invitamos a reflexionar sobre tus necesidades.

Preguntas que tienes que hacerte si quieres cambiar y mejorar la distribución en casa

Para mejorar la distribución de tu piso o tu casa, antes de tomar cualquier decisión ten en cuenta estas recomendaciones:

  • ¿Vas a comprar un piso sobre plano? Si es así, está en tu mano revisar la distribución propuesta por la constructora y, en la medida de lo posible, rediseñarla en base a tus necesidades junto con el arquitecto o interiorista.
  • ¿Tendrás las mismas necesidades ahora que en 5 ó 10 años? Piensa también a medio o largo plazo. Quizá ahora te sobran habitaciones, pero plantéate lo siguiente: ¿Las necesitarás para ampliar la familia? ¿Puede ser que tengas que trabajar desde casa? ¿Es posible que vayas a tener visitas a menudo?
  • ¿Qué espacio de casa utilizas y disfrutas más? Si la cocina es una de tus pasiones, dale mayor protagonismo a nivel espacial. O puede ser que tengas una amplia colección de ropa y entonces restar espacio a otras estancias para crear un vestidor es tu plan perfecto.
  • ¿Tu casa es temporal o a largo plazo? Si la intención a priori es vivir en esta casa muchos años, adáptala a todas tus necesidades. Pero si crees que es solo para un tiempo, crea una distribución estándar que responda a las necesidades más comunes para que tenga mayor potencial de venta o alquiler.

Las 8 claves para una buena distribución en casa

Si quieres mejorar la distribución de tu casa aquí te damos 8 claves para ganar espacio, hacerla mucho más funcional y aprovechar hasta el último milímetro:

1. Distribuir bien tu casa mejora la circulación

Tanto si hablamos del uso propio diario como a la hora de recibir visitas lo más funcional es dividir el plano de casa en dos grandes áreas: la zona privada o de descanso (dormitorios, baños…) y la zona pública o social (salón, comedor, terraza…). Lo ideal es que ambas estén separadas para que la circulación hacia la zona pública no tenga acceso por ninguna de las zonas privadas.

2. Elimina algunas paredes para crear espacios diáfanos

Te ayudará a mejorar la conexión entre espacios, crear ambientes más amplios y unificar zonas que puedan convivir. Unir salón y comedor es una de las mejoras en distribución decorativa más habituales, pero también puedes incluir en esta ecuación la cocina. De este modo, al unificar salón, cocina y comedor comparten un único y amplísimo espacio.

Si una cocina abierta no te convence del todo, siempre puedes recurrir a opciones semiabiertas, como puertas correderas, paneles plegables o una pared de cristal. Las de perfilería metálica con cuarterones acristalados son una gran opción y, además, tendencia.

3. Apuesta por las puertas correderas

Como hemos dicho, las puertas correderas son unas grandes aliadas a la hora de crear espacios semiabiertos, y también lo son en el resto de casa. Si vas a realizar una reforma este tipo de puertas te ayudarán a ahorrar muchísimo espacio. ¿Por qué? Las puertas convencionales, pivotantes o batientes requieren de un ángulo de apertura que elimine superficie útil. Algo que no ocurre con las correderas, pues se deslizan o bien dentro de la pared o bien en paralelo, como el caso de las colgantes o las puertas tipo granero.

4. Armarios empotrados: el poder de lo invisible

Si vas a realizar una reforma apuesta por los armarios empotrados. Aunque requieren más inversión, crearán una mayor armonía espacial. Cuantos menos elementos no encastados tenga un espacio, más grande y pulido se verá. Si eliges acabados del mismo tono que las paredes, ganarás amplitud visual.

5. Muebles a medida para ganar espacio y personalidad

Los muebles a medida son los grandes favoritos de los interioristas, pues se adaptan de una forma tan magistral a cualquier espacio y aprovechan todo su potencial. Un gran ejemplo son los recibidores pequeños: un mueble a medida con un fondo estrecho, no estándar, y de suelo a techo puede convertirse en el mejor aliado de almacenaje.

6. Luz natural: vitamina para ti y para tu casa

Aprovecha al máximo las entradas de luz natural. Si vas a realizar una reforma, procura agrandar al máximo si es posible las ventanas y los ventanales, y elige cerramientos que enfaticen su amplitud y dispongan del menor número de particiones posible.

Deshazte de las cortinas opacas y tupidas y escoge estores en tonos claros y tejidos livianos para que puedas seguir aprovechando la luz natural cuando quieras mantener la privacidad.

Abrir espacios te permitirá también bañar de luz aquellos que antes quedaban cerrados, como en el caso de muchas cocinas que, una vez abiertas al salón comedor, se vuelven mucho más luminosas y agradables.

7. Iluminación integrada y adiós a más obstáculos visuales

La iluminación integrada, ya sea en focos encastrados, iluminación perimetral o bajomueble como en el caso de la cocina, permite prescindir de lámparas y pantallas que restan espacio visual. Además, se verá mucho más limpio y unificado.

8. Suelos uniformes

Aunque no es un elemento claramente distributivo, sí tiene un gran impacto en la percepción del espacio. Elegir un mismo suelo para todas o casi todas las estancias y colocarlo de manera ininterrumpida, siguiendo el mismo sentido, generará una mejor fluidez espacial.

La mejor distribución de una casa según el tipo de espacio

Cómo distribuir el salón-comedor

Si el salón es alargado no olvides dejar una zona de paso de lado a lado ininterrumpida. De esta forma evitarás tener que zigzaguear para pasar de un lado a otro. Distribuye los muebles en paralelo: sofá y mesa de apoyo a un lado, y mueble bajo o aparador en el otro lado y, en uno de los lados, la mesa. Si es muy estrecho, opta por muebles de poca profundidad y en tonos claros. Y siempre coloca los muebles de almacenaje en la pared más alargada si quieres aprovechar al máximo el espacio.

Si el salón es de planta cuadrada, la distribución ideal es en forma de L, eligiendo un sofá rinconero o con chaise longue para sumar el máximo número de asientos y, en el extremo opuesto, la mesa de comedor.

Cómo distribuir la cocina

Si quieres saber cómo distribuir una cocina alargada la clave es calcular la zona de paso que quedaría si dispones muebles a lado y lado, teniendo en cuenta que su profundidad estándar es de 60 cm y debes poder abrirlos cómodamente.

Si la zona de paso resultante es de mínimo un metro de ancho, entonces puedes crear una distribución en paralelo, con las zonas de preparación, agua y fuego preferentemente en línea. Si no dispones de un metro de ancho, entonces lo recomendable es prescindir de uno de los lados y colocar todos los elementos en línea. Al otro lado, puedes añadir una mesa abatible y unos ligeros taburetes para disponer de un pequeño office.

Si la cocina es cuadrada, la distribución ideal responde a lo que se llama el triángulo de trabajo. Crea una U imaginaria y coloca a un lado la zona de preparación, en la central la zona de fuegos y, al otro, la zona de aguas o fregadero. Este tipo de distribución en la cocina te permitirá trabajar más cómodamente.

Cómo distribuir un despacho en casa

El auge del teletrabajo ha impactado de pleno en muchos hogares, en los que se ha recurrido a un cambio de uso de algunos espacios para reconvertirlos en oficina de trabajo. Si es tu caso y también te preguntas cómo distribuir el despacho en casa, estas son las claves:

  • Coloca la mesa cerca de la ventana, si puede ser de manera perpendicular para evitar molestos reflejos en la pantalla del ordenador.
  • Si tienes espacio, una mesa en L te ayudará a disponer de dos áreas: la del ordenador y otra superficie para libros, escritura y demás.
  • Básico: una silla ergonómica que cuide de tu postura durante las horas de trabajo.
  • Estantes y accesorios que te permitan mantener el orden.
  • Y mucha luz: tanto natural como artificial con una lámpara de sobremesa.

Cómo distribuir el recibidor

Cuando nos planteamos cómo distribuir el recibidor hay que evitar enfrentar la puerta de entrada con otra puerta o con un espejo pues según el Feng Shui, evitará la entrada de buenas energías y, además, resulta algo desconcertante. Si es pequeño, alíate con percheros de pared y muebles de almacenaje volados para liberar superficie en el suelo y crear sensación de ligereza. Los colores, siempre claros y luminosos.

Cómo distribuir el baño

A la hora de pensar en la distribución del baño lo primero que hay que tener en cuenta son los bajantes, que marcarán dónde deben ir las piezas principales como los sanitarios, si no quieres recurrir a modificaciones mucho más costosas. Las puertas correderas ayudarán a ahorrar hasta 1,5 m2, pudiendo destinar ese espacio a muebles de almacenaje o a una ducha más amplia, por ejemplo.

Cómo distribuir el dormitorio

La distribución del dormitorio se basa en unas sencillas reglas. La primera: comprobar que en él cabría un círculo imaginario de 2,60 m de diámetro, para asegurarte de que al colocar la cama el espacio seguirá siendo funcional y práctico. A ambos lados de la cama debe quedar un espacio de 60 centímetros. Pero si a uno de estos lados se encuentra el armario, este deberá ser de 1 metro para permitir la apertura de las puertas. Finalmente, lo ideal es colocar la cama en paralelo o enfrentada a la ventana.

Consejos decorativos que sumarán puntos a la distribución

  • Utiliza colores claros para pintar las paredes: multiplicarán la luz.
  • Elige muebles de líneas rectas.
  • Aprovecha los rincones: ya sea para colocar un mueble a medida para almacenaje o para colocar una bonita planta.
  • Elige estores o cortinas ligeras que dejen pasar la luz.
  • Decántate por parquet en tonos claros: parecerá que el espacio tiene más metros cuadrados.

Errores que debe evitar

  • Colocar muebles junto a las ventanas: impedirán aprovechar la luz natural y empequeñecerán el espacio.
  • Disponer puertas enfrentadas.
  • Elegir muebles demasiado pequeños o grandes: siempre deben guardar proporción con el espacio.
  • Escoger colores oscuros para los suelos, las cortinas y los textiles de mayor superficie, sobre todo si el espacio es pequeño.
  • Utilizar un pavimento o un color de pared distinto en cada espacio.
  • Ubicar las zonas públicas o sociales de manera que para acceder a ellas se tenga que pasar por áreas privadas (por ejemplo, acceder a la terraza principal desde el dormitorio).

En Gilmar tenemos la casa que buscas con la distribución idónea para ti, para tu familia y para tu forma de vivir.