En los últimos tiempos, contar con un espacio de trabajo en casa se ha vuelto imprescindible, motivo del creciente interés por saber cómo diseñar una oficina en casa.

Si algo está claro, es que, de una forma u otra, el teletrabajo ha venido para quedarse. Por eso, desde el momento de confinamiento, muchos de los hogares, han tenido que ir adaptando algún rincón para poder trabajar de forma cómoda y ser igual de productivos que en la oficina.

Lo ideal para conseguir este objetivo es que el espacio en el que teletrabajamos sea una habitación diferenciada del resto de espacios, aislada y que transmita tranquilidad; pero siendo realistas, no es tarea fácil y esto no siempre es posible. Hay quiénes sí que cuentan con ese espacio extra en sus viviendas, para poder crear una oficina en casa de forma sencilla, pero cuando el espacio es limitado, esta tarea es más complicada.

Por suerte, hoy en día hay soluciones para todo tipo de espacios. Y, como expertos, queremos darte algunas claves para que puedas diseñar el espacio de trabajo perfecto para ti. ¡Presta mucha atención!

Busca el mejor lugar para crear tu oficina en casa

Antes de nada, lo primero es definir en qué parte de la casa vamos a ubicar ese espacio de trabajo. Como hemos comentado, lo ideal es que sea una habitación independiente, pero si el espacio de tu vivienda no te lo permite, no te preocupes.

Piensa en un rincón o espacio tranquilo de la casa, alejado de las zonas comunes y que no sea un sitio de paso. No importa si es en el salón, en el comedor, en la cocina o en el dormitorio; lo importante es que haya hueco suficiente y que te permita cierta separación o aislamiento del resto de la casa. Por lo tanto, ¿qué habitación es mejor? Dependerá de cuántas personas viváis en el hogar, los horarios de trabajo, las rutinas diarias, etc.

También es importante pensar en cuánto espacio necesitarás para desarrollar tu actividad profesional, porque no es lo mismo quien trabaja con elementos físicos, como archivos o documentos; a quien, únicamente, necesita un ordenador portátil.

Aunque todo esto es la teoría… Cuando llegamos a la práctica empezamos a ver dificultades, por ejemplo, la necesidad de tener lo más cerca posible a los peques. Así que todos los consejos y recomendaciones que te contamos a continuación, podrás adaptar de un modo u otro a tus necesidades y circunstancias tanto personales como familiares. Por eso, deberás valorar las opciones y escoger el lugar que mejor se adapte a ti.

Hacer una oficina en casa paso a paso

Una vez que hayas escogido en qué espacio vas a crear tu oficina en casa, estos son algunos de los aspectos más importantes que debes tener en cuenta.

La iluminación, cuanto más natural mejor

Lo ideal es situarte lo más cerca posible de una ventana para aprovechar la luz natural. Pero sabemos que, dada la orientación de muchas viviendas y la distribución de los espacios, esto no siempre es posible.

A pesar de todo, en la medida de lo posible, nuestra recomendación para por que el espacio de trabajo esté lo más cerca posible de una ventana. Ya no solo por la luz natural, sino porque poder ver el exterior, siempre que la calle no sea muy ruidosa, ayuda a que fluya la creatividad y a descansar la vista.

Añade puntos de luz auxiliares

Si no puedes tener toda la luz natural que te gustaría o si, aun así, la zona de trabajo queda demasiado oscura, puedes añadir varios puntos de luz auxiliares. Para ello, debes tener en cuenta la cantidad y el tipo de luz óptimo para tu trabajo.

Por ejemplo, si quieres evitar reflejos en la pantalla del ordenador para no forzar la vista, coloca lámparas que den luz cálida, entre 2.700 y 4.000 K, y de forma indirecta. Si tu trabajo es manual y consiste en escribir, ilustrar, etc.; una luz cenital será lo más recomendable en tu caso.

Escoge colores neutros o poco saturados

Oficina en casa paso a paso

Los colores son capaces de influir en nuestras emociones y en nuestras reacciones fisiológicas. Por tanto, cuando hablamos de cómo diseñar una oficina en casa que favorezca nuestra productividad, la gama cromática que elijamos es muy importante. Ten en cuenta que vas a pasar muchas horas ahí.

Más allá de tus preferencias personales, tienes que saber que los tonos pálidos y poco saturados contribuyen a la calma, y, que los claros y neutros, favorecen la concentración. Por el contrario, deberías evitar las superficies oscuras o brillantes, ya que reflejan la luz y agravan la fatiga visual.

Y si temes que tu espacio de trabajo quede demasiado aburrido, puedes crear contrastes y mantener la armonía cromática incluyendo muebles o pequeños accesorios.

La silla y la mesa: una elección decisiva

Si hay algo que vas a utilizar a diario es la silla. Trabajar muchas horas seguidas sentado puede ocasionar daños en la espalda, así que nuestra recomendación es que te hagas con un modelo ergonómico, cómodo y regulable, que recoja bien tu zona lumbar. No escatimes ni te dejes llevar por el diseño ni el estilo, o tu salud lo sufrirá.

En cuanto al escritorio, lo aconsejable es que sea lo suficientemente espacioso como para que puedas apoyar las muñecas y los antebrazos, y estirar y elevar las piernas. Si además la mesa es elevable, alternar periodos sentada y de pie te ayudará a estirar y mover las piernas de forma regular.

Espacio de almacenaje para mantener el orden

Tu espacio de trabajo debe estar siempre bien limpio y ordenado. Tenerlo todo bien organizado ayuda a optimizar el tiempo, ya que tienes todo localizado y a mano; y a mantener el estrés a raya. Por tanto, planifica bien qué elementos de almacenaje vas a necesitar: estanterías, armarios, mesas auxiliares, cajoneras, etc., y hazte con ellos.

Y no solo eso. Los accesorios para colocar bolígrafos, bloc de notas; así como las carpetas, los archivadores y demás, también son importantes para mantener ordenada y organizada tu oficina y que visualmente se vea limpia.

No olvides darle un toque personal

Si te gustan las plantas, pon alguna natural o incluso artificial. Las plantas hacen que los espacios sean más acogedores.

Coloca objetos que sean especiales para ti, como recuerdos de viajes, fotografías de tu familia y amigos, cuadros o láminas que te inspiren, etc.

Todos estos detalles son los que harán que tu espacio de trabajo sea especial y único.

¿Ya sabes cómo vas a crear tu oficina en casa?

¡Ahora te toca a ti! Ya sabes cómo diseñar una oficina en casa, solo falta que pongas en práctica todos estos consejos que te hemos dado desde Gilmar y si necesitas más ayuda, siempre puedes solicitar el asesoramiento de un profesional.