Los meses de enero y febrero son los más fríos del año. Es en este momento del año cuando más empeño debemos poner en aislar la casa del frío correctamente, ahorrando una cantidad considerable de energía para la protección del medio ambiente y también de nuestro bolsillo.

Según los últimos datos inmobiliarios, la gran mayoría de viviendas pierden energía durante el invierno debido a un mala aislamiento de los suelos, paredes y techos. Esto supone un aumento del gasto energético, que al fin y al cabo, por mucho que subamos la calefacción, no conseguirá combatir el frío de una manera efectiva.

Para evitar que esto llegue a convertirse en un problema, no es necesario hacer grandes reformas en las viviendas. Nuestro equipo de Reformas e Interiorismo nos dan las claves para aislar la casa del frío correctamente, con el mínimo esfuerzo y logrando ahorrar en la factura de la luz o el gas. ¡Toma nota y no pases frío estos meses!

Cómo aislar la casa del frío paso a paso

Protege tus ventanas

Uno de los mayores causantes de la pérdida de calor en el hogar es el mal aislamiento de las ventanas. Si este es el caso de tu vivienda, tienes dos posibles opciones: cambiar las ventanas por un sistema de doble acristalamiento o bien sustituir las cortinas livianas por unas más gruesas que aíslen del frío.

Las cortinas gruesas suponen una excelente barrera aislando el interior de la casa del frío exterior. El calor se mantiene más fácilmente, controlando las corrientes de aire que entran por las pequeñas rendijas de las ventanas antiguas.

Sella los huecos

Cualquier hueco por el que pueda colarse el frío interfiere en el buen uso de la calefacción en el hogar. Además de las rendijas de las ventanas, también podemos sellar los huecos de las puertas y otras grietas por dónde se pierda el calor del hogar.

Revisa cuáles son los puntos débiles de tu hogar y encuentra la mejor solución para hacer un sellado rápido y sencillo. O dar un paso mayor y llevar a cabo la reforma que necesitas para aislar la casa del frío de una manera correcta.

Cierra las puertas

Las puertas cerradas, incluso dentro de casa, evitan que el frío entre en las habitaciones que más solemos usar. Mantén cerradas las puertas de las habitaciones mientras no las estés usando, por ejemplo la de la cocina cuando te encuentres en el salón, o la puerta del baño que da directamente a la habitación para mantenerla mejor aislada durante la noche.

Controla la temperatura

Una temperatura perfecta para estar cómodo en casa es la de 20ºC aproximadamente. No es necesario que te pases el día en manga corta para disfrutar de la calidez de tu hogar. En invierno es normal llevar una manga extra incluso cuando estás en la intimidad de tu hogar.

Si tienes termostato programable, procura mantenerlo entre unos 20 y 23ºC. Aprovecha la luz del sol durante el día y sube un poco la calefacción por la noche, para equilibrar la temperatura en casa sin abusar del consumo.

Revisa los aparatos de calefacción

¿Crees que tu sistema de calefacción no calienta como debería? Todos los aparatos deben seguir un proceso de revisión cada 2 ó 3 años para que su funcionamiento sea correcto, aumentando así la eficiencia. Esto nos permite consumir solo la energía justa, aprovechándola mucho mejor.

Evita las pérdidas de calor importantes

Si tu casa no está bien aislada, no esperes más y haz la reforma que necesitas. El tejado y las ventanas son las zonas de la casa en las que se producen las pérdidas de calor más importantes, alrededor del 44% del total de la vivienda.

Hacer un cambio de la cubierta del tejado y del tipo de ventanas puedes hacerte ahorrar hasta un 40% de la energía consumida. Se trata de reformas muy sencillas que además resultan económicas, recurriendo a materiales aislantes tan baratos y eficientes como el poliestireno extruido, o la lana mineral.

Para las ventanas, un buen acristalamiento y el aislamiento del tambor de la persiana son más que suficiente para que la casa no pierda calor durante los meses de frío. Así, además de aislar la casa del frío, se conseguirá aumentar la eficiencia energética de la vivienda.

Aislar la casa del frío con una buena reforma también te será de gran utilidad para proteger el ambiente en los meses de verano, controlando más fácilmente el consumo energético de los calefactores para que no haya pérdidas importantes. Si necesitas ayuda para aislar correctamente tu hogar, desde Gilmar podemos asesorarte y ayudarte a dar este gran paso.

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